En el coloquio celebrado en los Salones del Centro Cuesta acerca de tres libros escritos por el
doctor José Rafael Abinader se puso de relieve, en el caso de “Verdades
Históricas”, que la ocupación militar estadounidense en noviembre de 1916 no se
debió, de ninguna manera, a que el gobierno dominicano había violado la
convención firmada entre los dos países en febrero de 1907 que prohibía
contraer empréstitos sin la expresa
autorización de los Estados Unidos. Nada más alejado de la verdad.
El doctor José Rafael Abinader explica en Verdades
Históricas que el motivo real de la presencia de la Infantería de la Marina de los
Estados Unidos era evitar a todo trance que el general Desiderio Arias fuera
electo Presidente de la República por el Congreso Nacional. El primero de mayo
1916. Desiderio, Ministro de la Guerra del Gobierno de Juan Isidro Jiménez
había rodeado con sus tropas el Congreso Nacional, exigiéndoles a los legisladores
la destitución del Presidente Jiménez y que designaran como Jefe de Estado al
propio Desiderio Arias. Sucede que ese mismo día la marina norteamericana no
espera la decisión congresual, estableciendo campamentos en las afueras de
Santo Domingo. Así las fuerzas del General Arias se vieron prácticamente inmovilizada por la Infantería de
la Marina. El 13 de mayo el almirante William Caperton le envía un ultimátum a Desiderio para que entregue las armas en un
plazo de 48 horas; y el día 15 Desiderio reúne sus hombres y se interna en los
montes del Cibao, donde permanece durante los ochos años que dura la ocupación
extranjera.
Expresa que lo cierto es que los Estados
Unidos temían que si Desiderio Arias llegaba a la presidencia se inclinaría en favor del imperio alemán en el
inicio de la primera Guerra Mundial en la cual eventualmente participaría los
Estados Unidos al lado de Francia e Inglaterra. Washington temía que el general
Arias aceptara en el territorio dominicano
una base militar de operaciones del imperio alemán.
Los antecedentes así
lo demostraban: Tanto Desiderio como el General Demetrio Rodríguez, su íntimo
amigo, le había enviado correspondencia al cónsul alemán acreditado en Santo Domingo en la que
decía que rechazaban la intervención norteamericana en el país prefiriendo una
alianza con Alemania.
En Haití ocurría lo
mismo, el general Rosalvo Bobo, graduado universitario se identificaba con
Desiderio en varios aspectos. Militares
revolucionarios y Ministros de Guerra ambos, su radio de acción estaba en la
frontera y coincidían sus simpatía hacia
Alemania. El general Bobo, con el apoyo logístico de Arias inicia la marcha de
cabo haitiano a Puerto Príncipe, ciudad donde lo esperaban sus partidarios para
apoderarse del gobierno. Pero el almirante William Caperton, enterado por los
servicios de inteligencias de que Bobo simpatizaba con los alemanes, se le
adelanta y desembarca la infantería de marina, declarando la ocupación militar
de Haití.
En su libro La
corrupción en América Latina relata: En 1979, el Presidente Don Antonio Guzmán
citó al Contralor General de la República, doctor José Rafael Abinaderpara que
investigara la retención de 38.7 millones de dólares que pertenecía al Consejo
Estatal del Azúcar por parte de la empresa azucarera Golf+Western.
Esa alta suma era un beneficio obtenido mediante la venta futura de azúcar
con el respaldo de un 60 por ciento del dulce producido por el CEA.
El doctor José Rafael
Abinader le sugirió a Don Antonio Guzmán que como se trataba de una operación
comercial entre el CEA y la Golf+Western la investigación debía hacerla el
auditor del CEA. Pero el Presidente
Guzmán enfáticamente le dijo no, Abinader tiene que ser tú.
Después de ocho meses
investigando con dos viajes a Wastington Abinader, acompañado por dos
funcionarios serios y honestos como lo eran Bienvenido Mejía y Mejía y Virgilio
Díaz Grullón, demostró la veracidad de esa retención y que por tanto la
Golf+Western debía devolverle esa elevada suma al Estado Dominicano. Hubo
difusión de esa actitud honesta y seria del doctor José Rafael Abinader, y
enterado el departamento de Estudios Iberoamericanos de la Universidad de
Harvard, el director de ese departamento le tramita una invitación al doctor
José Rafael Abinader para que expusiera en ese prestigioso recinto los
pormenores de la corrupción administrativa en la América Latina y el caso de la
República Dominicana.
y para comentar su
libro El globo una Moneda Mundial lo hiso refiriéndose a los tiempos actuales
que hay sobre los debates internacionales de la problemática económica y los
impases con la moneda existentes.
En este mismo momento
existe una turbulencia monetaria que afecta a las principales monedas del
mundo. El Euro, la moneda de 17 países
de Europa, se tambalea, el dólar en
cierto modo se devalúay los chinos se niegan a revaluar el yen.
La secuencia histórica
de la moneda latinoamericana ha tenido
siempre resultados negativos y devaluatorios en perjuicio de los sectores más
pobres.
Durante muchos años
el dólar ha desempeñado las funciones de moneda mundial, pero ahora han surgido
otros signos monetarios que le disputan esa ventaja. Japón y China han acordado intercambiar bienes
y servicios sin la intervención del dólar, y además hay vaticinios de que Sur América
se propone crear una moneda para la región y que en Asia se está hablando
también de un signo monetario asiático.
Últimamente, los
gobiernos europeos de la zona del euro han admitido la desventaja del euro
porque impide el funcionamiento de
emisiones y contracciones como era la política monetaria de los países ante de
afiliarse al Euro. A pesar de las
peticiones el gobierno Alemán no cedía en cuanto a rescatar la economía de los países con mucha deuda. Hace unos seis meses que el doctor José Rafael
Abinader escribió un artículo en la prensa sugiriéndole a la primera ministro
alemana, Ángela Merkel, que no ofreciera tanta resistencia y que no insistiera
demasiado en la austeridad porque un ahorro colectivo se convierte en un
desahorro y que permitiera que el Banco Central europeo lanzara emisiones
monetarias para promover el crecimiento económico y desterrar la crisis con sus
secuelas de desempleo y pobreza. En los últimos días ya se ha dispuesto lo que
había sugerido el doctor Abinader.
Los libros fueron
comentados por el escritor Amauri
Justo y Duarte, comentó el libro “la Corrupción Administrativa en América
Latina: Caso De República Dominicana”; el poeta y escritor
Justinianos Estévez, trató el libro “Globo
Moneda Mundial” y el Doctor
Miguel Ángel Prestol González, se refirió a la obra “Verdades Históricas”.
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